Aumentan de forma alarmante los delitos informáticos en España

En los últimos años, los delitos informáticos han adquirido un protagonismo sin precedentes en la sociedad española. De hecho, según datos publicados en el Balance de Criminalidad del Segundo Trimestre de 2024 del Ministerio del Interior, en el período de enero a junio de 2024, se registraron 237.640 infracciones penales relacionadas con la cibercriminalidad, lo que representa un incremento del 9,2% sobre el mismo período de tiempo en 2023.

En este mismo informe se destaca que la cibercriminalidad y, en particular, las estafas informáticas, han experimentado un crecimiento significativo desde el año 2016, cuando se registraron 70.178 estafas informáticas, puesto que en 2023 este número se elevó a 427.448 estafas. Esto muestra un incremento del 509,1% en ocho años.

Estas cifras ponen de manifiesto una tendencia preocupante que plantea serias interrogantes sobre la seguridad en el entorno digital y la necesidad de tomar medidas efectivas para contrarrestar esta ola de criminalidad.

Los ciberdelitos en España

Nadie pone en duda que la digitalización ha transformado nuestras vidas, facilitando el acceso a la información y la comunicación. Sin embargo, esta misma transformación ha abierto la puerta a nuevos tipos de delitos. En el mencionado informe, también se detalla que los ciberdelitos registrados en el segundo trimestre de 2024 representan el 19,4% del total de las infracciones penales y que muchos de ellos están relacionados con el fraude online y las intrusiones en sistemas informáticos. Esto último no solo afecta a personas particulares, sino también a empresas y entidades gubernamentales, que se ven obligadas a invertir en medidas de ciberseguridad.

Datos clave de INCIBE

Por su parte, el Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE), también ha aportado datos significativos sobre la situación actual de la ciberseguridad en España. En su reciente balance, INCIBE reportó más de 97.000 incidentes relacionados con la ciberseguridad durante el año 2024. El fraude online se erige como uno de los incidentes más frecuentes, seguido de las intrusiones en sistemas y los incidentes en tiendas online fraudulentas. Este panorama revela una creciente vulnerabilidad en el ecosistema digital, donde tanto los consumidores como las empresas son blanco fácil para los ciberdelincuentes.

Tipos de delitos informáticos en aumento

Hay que tener en cuenta que la diversidad de delitos informáticos es amplia y abarca desde el robo de datos hasta el fraude financiero. En tal sentido, a continuación, presentamos algunos de los tipos de delitos informáticos más comunes que han crecido en los últimos años:

• Fraude online: este tipo de delito incluye estafas a través de plataformas de comercio electrónico, donde los delincuentes crean sitios web falsos para engañar a los usuarios y robar su información personal o financiera.
• Phishing: este método consiste en que, a través de correos electrónicos fraudulentos, los ciberdelincuentes suplantan la identidad de instituciones legítimas para obtener datos sensibles de los usuarios.
• Intrusiones informáticas: muchas empresas sufren ataques a sus sistemas informáticos, lo que puede llevar a la pérdida de datos valiosos y a un daño reputacional significativo.
• Robo de identidad: este delito se produce cuando un delincuente utiliza información personal de otra persona para cometer fraudes o delitos.
• Malware y ransomware: lamentablemente, los ataques mediante software malicioso son cada vez más comunes, debido a que el ransomware ha ganado notoriedad al bloquear el acceso a datos y exigir un rescate para liberarlos.

El rol de los peritos informáticos

Ante este panorama de creciente criminalidad digital, los peritos informáticos adquieren un papel crucial dentro del juego, ya que estos profesionales altamente especializados son fundamentales en la investigación de ciberdelitos. Su labor consiste en analizar dispositivos electrónicos y rastros digitales para identificar a los responsables de delitos informáticos.

Para ello, los peritos informáticos utilizan herramientas avanzadas que les permiten recuperar información borrada, analizar patrones de comportamiento y rastrear transacciones fraudulentas. Por lo tanto, se trata de un proceso vital a la hora de conseguir pruebas que puedan ser utilizadas en procedimientos judiciales, contribuyendo a que la justicia actúe de manera efectiva.

Medidas de prevención y concienciación

Es evidente que, ante el alarmante aumento de los delitos informáticos, se hace necesario adoptar medidas de prevención y concienciación. Aquí les compartimos algunas recomendaciones clave:

• Educación en ciberseguridad: es fundamental que tanto particulares como empresas reciban formación sobre las mejores prácticas en ciberseguridad. Conocer las amenazas y cómo protegerse es el primer paso hacia la seguridad.
• Uso de contraseñas fuertes y seguras: implementar contraseñas robustas y cambiarlas regularmente también puede ayudar a proteger cuentas y datos sensibles.
• Actualización de software: el mantener el software y los sistemas operativos actualizados es una de las medidas más efectivas para prevenir vulnerabilidades que puedan ser explotadas por ciberdelincuentes.
• Desconfianza ante ofertas demasiado buenas: es importante ser escéptico ante ofertas que parecen demasiado atractivas, especialmente en plataformas de comercio electrónico.
• Uso de autenticación en dos pasos: el activar la autenticación en dos pasos añade una capa extra de seguridad, haciendo más difícil el acceso no autorizado a cuentas.

La variedad de estos delitos pone de manifiesto la necesidad urgente de que tanto las personas particulares como las empresas adopten medidas de precaución y se mantengan informadas sobre las mejores prácticas en ciberseguridad.